Ciudad de México.- Luego de haber descubierto tres cámaras subterráneas debajo del templo de la Serpiente Emplumada, en Teotihuacán, científicos del Instituto Nacional de Antropología e
Historia (INAH) encontraron un centenar de objetos metálicos que tendrían cerca de 1.800 años de antigüedad.
En este sentido, dijeron que podría tratarse de una ofrenda atípica, similar a otras que han sido encontradas en el túnel. Hasta el momento se desconoce si tenían alguna función específica
o solamente se trataba de algo decorativo, y el INHA ya realiza estudios de todos los materiales encontrados en el túnel que recorrió el robot Tláloc II-TC. Los objetos miden entre 4 y 12
centímetros pudieron tener forma de esfera, además poseen un núcleo compuesto por arcilla y otros materiales orgánicos. De acuerdo con el arqueólogo Jorge Zavala, las esferas contaban con un
recubrimiento de pirita, un metal conocido como “el oro de los tontos”, mismo que experimentó un proceso de oxidación para convertirse en jarosita. Sergio Gómez Chávez, director del Proyecto
Tlalocan, dijo que “esto significa que en tiempos prehispánicos tenían la apariencia de esferas metálicas; hay cientos de estas en la cámara sur”. Incluso los muros y el techo de las cámaras
están cubiertos con un polvo mineral compuesto de magnetita, pirita y hematita, lo cual proveía al lugar de un singular brillo. “Creemos que personas de alto nivel, sacerdotes y gobernantes,
venían aquí abajo para llevar a cabo rituales”, dijo Gómez Chávez.
El equipo de investigación ahora se dispone a iniciar la siguiente fase del proyecto, explorar la última parte del túnel y tres cámaras a las que los arqueólogos le han echado ya un vistazo
gracias a las cámaras del robot Tláloc II-TC “El túnel está en una condición prístina, sin tocar por casi dos milenios”, dijo Ng “TC” Tze Chuen, un investigador independiente que trabajó en el
diseño del robot explorador. ¿Pueden imaginarse lo que hay allí adentro? Ng, quien ayudó a crear el robot Djedi que exploró la Gran Pirámide de Egipto en 2010, piensa que el túnel mexicano tal
vez los lleve hacia uno de los hallazgos arqueológicos más significativos hechos en Teotihuacán. “Los resultados son muy alentadores”, agregó. De acuerdo al director del proyecto, el túnel fue
sellado dos veces por los teotihuacanos. Delgados muros, erigidos para bloquear el acceso, fueron demolidos hace cerca de 1.800 años con el fin de depositar algo muy importante en la cámara
central al final del túnel. “Quizás en este lugar hallemos los restos de aquellos que gobernaron Teotihuacán”, concluye Gómez Chávez.